Ha sido un honor poder celebrar un encuentro tan productivo con el president de Catalunya, Pere Aragonès.
Hemos reflexionado sobre el momento histórico para las naciones, el contexto de incertidumbre en el mundo y los retos de época que debemos afrontar como países. Compartimos, además, las agendas de país que deben ser las verdaderas agendas del cambio político. Y todo ello con una mirada de futuro y esperanza. He tenido también la oportunidad de conocer de cerca las políticas públicas puestas en marcha por la Generalitat. Políticas públicas que atienden las necesidades de la ciudadanía.
Pondré lo recogido hoy a disposición de la regeneración política que tanto necesitan Araba, Bizkaia y Gipuzkoa.